Cómo explicar la muerte a los niños

Es normal que algunos padres eviten dar explicaciones sobre la muerte a sus hijos, pero es un tema que tarde o temprano se tendrá que tratar. En ese caso, ¿cómo explicar la muerte a los niños?

Evitar hablar de estos temas, puede que crean una falsa seguridad de que todo va bien y estaremos evitando sentir y gestionar dichas emociones. Por ello, es importante saber expresarse y, dentro de las herramientas que los niños posean, gestionarlo a su manera.

Todo depende de la edad que los niños tengan, aún así no debemos subestimar su capacidad de comprender las situaciones, ellos también sienten y están viviendo la experiencia, aunque sea desde una perspectiva distinta. Además, no debemos olvidar que los niños tienen experiencias con la muerte todo el tiempo, cuando juegan, el que pierde muere, así mismo en los videojuegos, en los cuentos y en los dibujos.

Lo más importante a la hora de hablar de la muerte con un niño es:

• Debemos ser claros y directos. Es mejor decirle cuanto antes que un ser querido a fallecido, evitar el dolor no es el mejor recurso ante esta situación, puesto que es un hecho irreversible. A veces, debemos saber si estamos evitando su dolor o el hecho de enfrentarnos a esta situación con nuestros hijos.

• Siempre decir la verdad, a veces, pensamos que endulzando la situación o diciendo una «mentirijilla» ellos se sentirán mejor o evitaremos que sufran. La verdad es que el niño tarde o temprano descubrirá la verdad y puede que afecte su confianza sobre nosotros.

• Escuchar y aceptar sus sentimientos. A veces, asumimos que ellos no sienten lo mismo que nosotros o que no entienden la situación y por tanto, lo que ellos sienten puede no ser correcto. Nada más lejos de la realidad, pues cada uno siente y vive las situaciones a su manera, tanto de niño como de adulto.

• Responder a todas sus preguntas utilizando símiles que pueda entender y con lenguaje sencillo.

• No es recomendable que acudan a rituales sociales antes de la adolescencia: Es comprensible que queramos que nuestros hijos formen parte de la despedida de un familiar. En el caso de que acudan a un entierro, no debemos dejar nunca al niño solo y debemos responder a todas sus preguntas. Así que debemos estar seguros de que vamos a poder estar con ellos y vamos a estar anímicamente dispuestos a responder a todas sus demandas. En caso de que no queramos que asista, se pueden realizar otro tipo de rituales de despedida desde casa o en un ambiente más privado. Decir unas palabras o recordar grandes momentos pues ser una buena forma de despedirnos de un ser querido.

Hay un momento en la vida de todos que el concepto de muerte va cobrando sentido y que aceptamos que es parte de la vida y, que en algún momento, nuestros familiares y nosotros mismos vamos a morir.

Es normal por tanto que sea una época cargada de pesadillas o de estrés por parte del niño. Por eso una buena comprensión y tener la libertad y la confianza para hablar de este tema, hará que este proceso sea más sencillo y liberador para todos.

Aquí os dejo un libro que puede ayudaros en este tema tan delicado,  Explaining Death to Children del autor Earl A.Grollman.

Así mismo hay cantidad de cuentos infantiles que tratan el tema de la muerte desde una perspectiva infantil.

• «Siempre» de Ana Galán y Marta sedano. (3 años)
• «La isla del abuelo» de Benjies Davis. (3 a 6 años)
• «El árbol de los recuerdos» de Britta Teckentrup (4 a 7 años)
• «Regaliz» de Sylvia Van Olmen (6 a 9 años)
• «Un monstruo viene a verme» de Patrick Ness (12 a 15 años)

Y por supuesto no podemos olvidar la gran película de Disney «Coco» donde el tema de la muerte se muestra desde varios puntos y nos puede ayudar a entender un poco mejor este fenómenos que nos depara la vida.